La historia de Casa Alfaro es la historia de una de las muchas familias alpargateras procedentes de Cervera del Río Alhama, en La Rioja, de donde este producto es bandera y estandarte desde principios del siglo XX. Nuestros bisabuelos, a comienzos de 1900, comenzaron a fabricar aquellas alpargatas de cáñamo artesanas que, por su economía, lucían las gentes del campo.
La historia siguió su curso y la emigración de los pueblos a las ciudades llevó a la familia a Zaragoza, donde hoy en día, y desde 1980, Casa Alfaro es una tienda taller de alpargatas hechas a mano situada en el efervescente barrio de La Madalena.